martes, 7 de abril de 2009

FUNÁMBULO 2

Abajo hay una maroma de voces conteniendo impaciencias.

¡No ha de caer allí! ¡Pongan las redes!

Yo persigo esa nada con un extraño miedo, armándome el presente a mordiscones: una soga febril, una caña madura y la esperanza dormida que a ratos despereza.

¿Dónde va toda esa gente? ¿Qué disturbio cercano confundió sus memorias? Ya no puedo dormirme con mi duda; con ella voy hasta el final, con ella y los pocos ladrillos que me pesan.

No son tiempos de ruegos ni regresos, no son épocas de ahogadas inquietudes. El tiempo es una rueda vieja crujiendo su engranaje y estoy en lo alto de la noche sin más tino que el tránsito que tiembla.

Elvio Zanazzi

1 comentario:

Over dijo...

Corazón libre
(Rafael Amor)
Te han sitiado corazón y esperan tu renuncia,
los únicos vencidos corazón, son los que no luchan.
No los dejes corazón que maten la alegría,
remienda con un sueño corazón, tus alas malheridas.

No te entregues corazón libre, no te entregues.
No te entregues corazón libre, no te entregues.

Y recuerda corazón, la infancia sin fronteras,
el tacto de la vida corazón, carne de primaveras.
Se equivocan corazón, con frágiles cadenas,
más viento que raíces corazón, destrózalas y vuela.

No los oigas corazón, que sus voces no te aturdan,
serás cómplice y esclavo corazón, si es que los escuchas.