domingo, 27 de febrero de 2011

CONSERVACIÓN


Los vencidos siempre fueron despreciados en su ocaso por los que ayer los quisieron.
Rafael Amor


Asomo a la realidad.
Por la perilla de la sofisticada puerta se bambolea un mundo de cristianos y relámpagos. A cada relumbrón va un azote; a cada azote una peregrinación de voluntarios.
El delicado asunto del dinero, como dirían Prevert y Castillo, conserva la propiedad privada de los privados amaneceres.

Elvio Zanazzi
14 de julio de 2009

1 comentario:

Unknown dijo...

Ando buscando, por cierto en estos días, el poema de Prevert donde aparece esa frase..